"Erinnerungenaneineerinnerung"

C uando la vi por primera vez,  escribí en un papel, eso que sentía. Lo mismo que ahora siento. Lo mismo que hoy lamento. He hecho una incisión, en mi  corazón. Una herida tan profunda, aun mas, que la acuosidad del mar. Para que fluyan los recuerdos, y dejen así de habitar mi cuerpo. Porque yo sabia que jamas existiría, de ella, para mi, algún sentimiento. Todo esto es algo utópico, confuso, indebido, e irreal. Lo fatal de fracasar, de ser esclavo del dolor... de obedecer a la cobardía, de no mirarle con valentía... Y hasta hoy, en el mismo papel, sigo escribiendo, sobre.. ...aquello que siento cada vez que la veo, como si fuera un fiel secreto. no puedo evitarlo, es algo que hace o no hace daño, es pasar a su lado, sin ella notarlo                                                                                             porque en mi cabeza, Está el pírrico deseo, de sangrar sus recuerdos. Los momentos en que  apenas pude tene

Y o  reconozco este sol de fin de año. Este viento que sopla desde lejos, a veces cálido, a veces gélido. Es un aire cada vez más delgado. Todavía recuerdo el palpitar de mi corazón por aquellos días. Recuerdo la manera en que busqué, un amor que sencillamente,  después de encontrarlo, desaparecería. Y hoy, ella me habrá olvidado. Como el capullo abandonado que un dia, abandona, cual mariposa que hoy vuela lejos. Lejos, En cualquier cielo, menos en el mío. Y de vez en cuando le recordaré, porque recordar es bueno. Porque aun se eriza mi piel, tras cada recuerdo. Porque así es como me desconecto, de este mundo cruel. en que todo se olvida. Sí. Yo me acuerdo muy bien, del amor aquel, que busque con desesperación, ...para que desapareciera,  en la inmensidad del mar,  del universo...  y de los recuerdos eternos.

¿ Cómo explicarle al ciego, el color del cielo y de las nubes? ¿Cómo explicarle al mudo,  como decir un "te amo"? ¿Cómo explicarle al sordo,  el rugido del mar, o del viento? . Y podria ser fácil explicarlo.  Y aún, ellos mismos, entenderían. Pero aunque te dijera que te amo... No lo entenderías. Dejar pasar el tiempo,  hace daño... Mas daño que el filo de navaja, atravesando mi garganta. ¿Cómo explicarte  lo que siento? Porque veía yo, como el amor, en tí, hace mucho que se desvanecía. Como al llegar la noche. se desvanece el día. Y no comprenderías, porque te amo, como te amo. Eres como la roca del mar tan dura...y bella. Así siempre fuiste,  y asi siempre serás. Hasta que desaparezca en ti, todo vestigio de vida. y todo rastro, de mi amor cansado. Pero, Eres roca por fuera. y por dentro te llena el mar... ...el mar de tus lamentos y sollozos. Deja de fingir. Por favor, no niegues  mas tu amor. Pero si es m

 M is ojos están cansados de ver, ojos cerrados de tanto llanto. Cada mañana me despierto, y ¿cuantos mas no habrán despertado? Y dichosos son ellos, porque han dejado de sufrir. Y ¿que hay del que sigue aquí? Su alimento es la miseria. Y sin embargo no pide nada, mas que ser feliz. He visto una y mil vidas empezar, y una y mil vidas terminar. Y esta pregunta asalta mi pensar: ¿volverán estos miles de corazones  a palpitar? La vida, es tan efímera. Hoy es, mañana no es. Y dime tú, amigo mío, ¿qué es, sino un suspiro vano? Y al final, ¿es esto todo cuanto hay? He visto una triste sonrisa. He escuchado un llanto callado. Me queda un sabor amargo, me quedo frustrado. Ante el sufrir  ajeno, poco es lo que esta en mis manos. Y he seguido caminando, y respiro soledad, y demasiada maldad. Acaso es esa sangre derramada, la que hoy reclama: ¡no pedí venir al mundo! Sé de tantos huérfanos y viudas sin cobijo. ¿y qué de los padres, que han perdid

E lla, ella sigue en mi mente. Es como ver directo al sol. y tener su luz adherida a mi ojo. Sin importar que éste se cierre. Sin importar adónde míre. Ella sigue en mi mente. En mi bosque mental. A la par de una fuente... ...Le veo, como si ella fuera agua, y yo, sediento de sus besos. Ella tiene una mirada hermosa. Ella es la version de una melodia inédita, que a veces se ignora. Ella es tierna y a la vez odiosa. Hoy no puedo menos que pensarle. Este sentimiento cada vez se hace grande. Pero de nuevo me repito: "No quiero fallarme". Mil suspiros me abrazan, y en mi sufrir desesperado, recuerdo, su cabello negro, a veces rizado... ...y otras, enmarañado. A veces amarrado tan alto, como el cielo bello. O como dos nubes que descienden, en forma de melena. Y con olor a azucenas. Las siluetas de sus cejas, son como caminos que te llevan a dos estrellas. Dos estrellas que se llaman como ella. Y cada una de sus pestañas, son un poem

U n minuto en esta playa, es suficiente para recordar. El amor indómito. la pasión amable y excitante.   Hoy, como ayer, tu vida es ajena. Mi recuerdo, ya no te alcanza. Y no quiero ya verte, mas que en mi mente.   Tal vez, ya amas a alguien. Y es así como me olvidaste. Yo se donde estás. Y aunque podría, no te buscaría  jamás. Un día en la playa, es un día pasado. Es un tiempo perdido, pero jamás olvidado. Fue el día en que llamamos, nuestros delirantes deseos, por nuestros nombres. Eramos nuestros, por aquel entonces. Aqui. Justo aquí pasaron muchas cosas. Cosas que solo el cielo sabe. Mas allá de un beso o una caricia, era una química mas que abstracta. Única. Las olas y el mar nos envolvieron, fue esa sensación de placer, de tener, tú mi mano, y yo la tuya. De bebernos, como bebería agua, cual sediento. Te quise tanto. y prorrumpí en llanto, cuando entendí, que esto no sería para siempre. que este amor desaparecería como con el viento. que así como las olas van y vienen, para

H ay algo que no dije. y que siempre oculté. Hoy me quema. hoy, me insulta la pena. Yo tengo un secreto. uno que lo sabe, cielo, tierra y mar. Y sin embargo, aun vos pudiste saberlo. Y se quedó grabado, frente a tu silla, Y me pregunté:  "¿Por qué no lo hablé?" Ahora lo entiendo. Bueno fué, callarlo para siempre, porque no fuiste digna, de escucharlo. No, tu no fuiste digna, de siquiera escudriñarlo. Fue un secreto, que casi me dejó ciego. Lo que un día, flor de primavera, parecía, Resultó ser,  maleza entre la hierba. Resulto ser, pétalos de rosa, de acero, hierro y poca cosa. Más yo... hice tanto ruido, en tu mundo sordo e inerte. Y cada mañana el secreto, estaba en mis sueños. Ensayaba desvelartelo, y nunca pude hacerlo. Mas yo, nunca estuve, en tus pensamientos. Y eso, de verdad,  no era un secreto. Sencillamente no fué nuestro momento. Ni lo será. Nunca jamás.  Podría dejar pasar  el tiempo como dijiste. Y nun