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Al otro lado de las montañas


Al otro lado de las montañas,
donde ruge el viento.
Donde tu sonrisa magna,
adorna el sol.

Existe quizá,
una efímera apreciación,
de lo que es, lo finito,
y lo infinito.

Al otro lado de las montañas,
saber lo profundo que es tu amor.
Saber que cuando te alejas,
me sumerjo en el dolor.

Pensarte así,
es tan angustiante.
Que tus pechos
acaricien mi cara, para siempre.

Perderme, al otro lado de las estrellas,
volar en tu ácido firmamento.
Susurrarte un te quiero.
Besar tus cabellos.

Perderme en el oscuro café de tus ojos,
en ese espejo, cual marrón,
en el que se difumina la luz,
esa, que me ilumina.

Tus cabellos como enredaderas de azucenas,
adornan y perfuman el viento.
Al otro lado de las montañas,
donde mi sombra y mi deseo te acompaña.

Verme en tus ojos etéreos,
me hace sentir que toca cada estrella,
y sentir tus labios en los míos,
me anuncian algo extraño.

Yo siento una felicidad de tenerte,
mas una tristeza de saber, que nunca mas,
 volveré a amar así.
Beber la miel de tu boca..

Sentir la eternidad en un momento,
mas sabiendo que yo,
soy solo un simple mortal.


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