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La hora del olvido


Y de repente abrí mis ojos,
en dirección hacia el olvido.

Porque estaba a punto de entrar,
a la tierra que un día anhelé...


Y hoy,  no deseo mas...
como ya no deseo..

..esa ténue luz de sol

 que atraviesa las hojas.

Porque poco a poco, como agua que se filtra,
en la grieta de mi cansado corazón...

...permití que las sonrisas de un ser, fueran llenando,
Mi vacío. El gran agujero, que llevo en el pecho..

Tan solo para recordar, que estaba prohibido hacerlo.
Queria a quien me amaba. Y ese era el problema.

Mientras, amé a quien no debeía.
Porque la que me amaba, era parte de mi pasado.

Pero aquella a quien amé,
no era para mí. Pero la deseé.

Y no podía evitarlo.
y ¿como evitarlo, a pesar de su desdén.?

Y de repente, mi corazón palpitaba,
como una bomba subterránea,

y parecía que sonamban balbuceos,
sonidos que solo el amor podria barbucear.

Pero sin quererla, la quiero, o ya no.
Y la quíse y también la deseo o tal vez no.

Ella me habló, casi nada.
mientras yo, le inundé de palabras.

Sintiéndome necio a veces,
y otras llanamente ridículo.

Y de repente. una voz que me dijo:

"Ya. Es la hora del olvido.
No la dáñes. No te dáñes.

y no dañes mas a cual noble mujer.
olvida ya, y sigue adelante.

Para que pasés a la tierra,
que hoy,  por cierto no deseas,

pero que un dia anhelaste".

Comentarios

  1. The oblique and open nature of poetry allows you to see parts of yourself in the words of another person. Words, even in a language you don’t speak, can reflect hurt and unhappiness like a mirror. There is a strange comfort in that because pain can be a lonely and isolating experience. Thank you for sharing your poems this year. A

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