Luna

Ella, se parece a ti.
Es como el mar, como el viento,
como el amor, que no es amor. 

La luna esta triste, 

esta triste porque estoy sin ti.

Hoy la luna apenas alumbra.
 
Tu recuerdo se diluye,
poco a poco, como
el reflejo de la luna en el agua, y sin embargo sigue allí.

Como un espejismo. Sí.
Como una ilusion que se disipa,
allá en el arido desierto.
 

La luna contigo,
me contaba versos,
con ella, dichos inciertos.
 

Ella, es una, que me ve, como tú
y me habla, como tú.
pero no eres tú.
 

Una, que sonrie como tu,
que camina como tu,
a la que mi ojo admira.
 

Y su sombra, es la tuya,

tambien su piel y su aroma.
Sus ojos, que ante mi se asoman.
 

Pero no eres tu,
y no quiero su amor,
mas yo quiero el tuyo.
 

Ella desconoce la luna.
Para ella, es un punto que brilla,
Para ti, era nuestra luz.
 

Ella es estrella resplandeciente.
Pero tus ojos y tu piel,
eran leche y miel.
 

Todo esto es solo,
como el boceto de tu cara,
que según yo,  forman las nubes,
 

en este triste cielo,
que es mi corazón,
y desaparece, al querer tocarlo.
 

Y si acaso ves la luna,
esta noche, alcanzala,

¡Si!, tomala con tus brazos.
 

Es para ti, un regalo.
Porque te estare recordando,
y bajo su gris luz, tu nombre susurrando.
 

Para pintarte a lo lejos,
con brocha de brumas,
unas luciernagas de oro,
 

en tu ojos dorados,
un abrazo, de mis brazos,
ya cansados, creyendo tenerte,
 

Y sabiendo, acaso, que es falso.
Pero, mientras exista la luna,
te querré, tal vez, como a ninguna.