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La banca y su tristeza


 La ilusión terminó,
justo en el momento que comenzó,
camine por aquel lugar en el que solíamos conversar
y de repente comencé a soñar.

Creyendo encontrar
aquello que propuse anhelar,
mas sabiendo que no, no la debía desear.

Y ahora, ¿a quien le importa mi tristeza?
 no basta con los ojos cerrar,
cada vez que le veo pasar,
porque aun asi, su imagen sigue viva.

Y es cierto que mi vida,
no gira mas en torna a ella,
ni a nadie mas,
¿pero que puedo hacer?...

Si veo la misma banca en la que nos sentamos,
vacía y sola
con una tristeza profunda,
como la tuya o la mía.

Porque la fuente en la que hablamos de amores,
padece de sequía,
y pensar que planeamos irnos por siempre,
a la mágica ciudad de Almería.

Es esta triste banca, la que me hace recordar,
que una vez hubo un vacío, que solo ella podía llenar,
pero que hoy, que no esta, estoy observando el mar,
recordando que nuestros nombres en la arena ya no están.

Y es que lo escrito en la arena,
en poco tiempo se borrará,
porque asi paso con mis sentimientos,
quienes poco a poco fueron desapareciendo.

Y a esta banca sola y triste,
persigo con insistencia y se que la voz de mi corazón un día oíste
y se de todo el amor que me diste,
y no te puedo olvidar, por todo lo que para mi fuiste.
No me obliguen a fingir que no es asi,
mi corazón se ahoga, en el mar de recuerdos, y estaré vacío, cada vez mas, hasta que haya muerto,
ese tonto y estúpido delirio.

Sentado pues en esta banca sola,
entiendo que jamas habrá una oportunidad,
porque la que tuve, la solté,
como explota un grande globo, todo lo arruiné. 
Es la banca y su tristeza,
hasta recordarlo me estresa
no hay nada que me devuelva 

lo que no esperamos que en el aire se disuelva.

Y tenemos que aceptar aquí en nuestro corazón,
que al final, el tiempo para olvidar, es la solución
dicen que existe el dolor porque existe el amor,

pero es que es el amor lo que buscamos con tanto vigor. 

Veo la soledad y la tristeza de esta banca,
que testigo fue de nuestras palabras y risas, 
es hora de dejarla y abandonarla,
como un día hice, por que de veras la amaba.


Ahora, aferrado a la esperanza que es lejana
bella y falsa, excitante y a la vez vana,
extiendo mis alas y siento volar
para algo que aun es desconocido poder alcanzar.

Algo que sea mas que contento estar,
algo que significa mas que recibir dar...
algo que trae consigo el amor y su color
algo que la gente llama felicidad...





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